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Shakespeare y sus máscaras

Mié, 16/02/2022 - 16:06
Shakespeare y sus máscaras
Coreografía
Alicia Alonso
Música
Charles Gounod
Vestuario
Pedro Moreno
Escenografía
Ricardo Reymena

Adaptaciones orquestales: Juan Piñera
Libreto: José Ramón Neyra sobre la tragedia Romeo y Julieta, de William Shakespeare
Diseño de luces: Gloria Montesinos

Alicia Alonso ha concebido su ballet Romeo y Julieta o Shakespeare y sus máscaras, guiada por una notable voluntad de síntesis. Necesaria ha sido la traducción a la danza de los acontecimientos de la obra. El primer reto —que en el caso de Shakespeare es más sensible— es la interpretación de la parte de la acción dramática que está expresada sólo en palabras en la obra.El elemento inicial que el público recibe es la aparición de un Vendedor de máscaras, encarnación de Shakespeare, actor y dramaturgo. Las máscaras de la alegría, de la tristeza, de la muerte, etc., son símbolos de los caracteres teatrales, y el Vendedor las porta, interactúa mediante ellas con los personajes, y llega hasta a personalizarlas.

Presente durante toda la obra, Shakesperare/Vendedor de máscaras actúa omnipotente en los momentos que el propio dramaturgo decide recurrir a la casualidad, como en la escena en que Romeo recibe la noticia de la muerte de Julieta en vez de lo deseado por todos, el mensaje de Fray Lorenzo.

Como en la obra de Shakespeare, las escenas festivas, o de jolgorio popular alternan con las íntimas, con el protagonismo de los amantes. La estructura dramática posee un prólogo en el que se presenta el personaje del Vendedor de máscaras y se muestra la rivalidad de las familias, y concluye con la aparición del Príncipe de Verona, que prohíbe los enfrentamientos, so pena de castigos ejemplares.


"El Ballet Nacional de Cuba ha estrenado en Valencia una nueva producción clásica que continúa las líneas de estilo que han dado fama y perfiles a la compañía de Alicia Alonso, y un elenco entregado y capaz, incrementado con bailarines valencianos. El montaje es de una envergadura sin resquicios. Entre sus muchos aciertos —que comienzan por el vestuario imponente y bien engarzado a la época, de Pedro Moreno— está en su encuadre en un solo acto, con dos premisas: la distanciación del espectador, lograda con el rescate de la figura del narrador y conductor —en este caso un vendedor de máscaras que encarna al mismo Shakespeare— y de la inmediatez de las escenas, facilitada por un espacio único. Este planteamiento permite una agilidad narrativa que la creadora usa con libertad."

"...vistosas escenas de grupo, con el habitual virtuosismo de la escuela cubana de ballet"; y "preciosos y difíciles pas de deux".

Julia Martin, publicadas en el diario El Mundo, de Madrid, el 27 de julio


"La coreografía de Alicia Alonso, una sorprendente versión creada sobre el drama de Romeo y Julieta, fue largamente ovacionada en las cinco representaciones realizadas a partir del 23 de julio. La dinámica, la coherencia argumental, la claridad y el virtuosismo técnico de los intérpretes, estuvieron al servicio de la música de Charles Gounod, concebida originalmente para su ópera homónima y ahora presentada en versión orquestal. La escenografía del cubano Ricardo Reymena, una moderna y estilizada versión de un teatro isabelino; y el vestuario del español Pedro Moreno, un derroche de imaginación, colorido y majestuosidad, colaboraron de manera considerable al éxito del espectáculo. Un detalle particular: la presencia de un personaje central que sirve de hilo conductor en el desarrollo de la trama, y que representa a William Shakespeare como un vendedor de máscaras —los símbolos de los sentimientos, pasiones y valores de la tragedia—. Esta figura crea, impulsa y define cada personaje, pero también participa y sufre en este drama, en el que la coreógrafa muestra las facetas del amor de la obra del dramaturgo inglés. El papel de Shakespeare tuvo un extraordinario intérprete en Octavio Martín, un bailarín sólido y de fuerte teatralidad. Los célebres amantes de Verona contaron con destacados protagonistas: Laura Hormigón con Óscar Torrado, Viengsay Valdés con Joel Carreño; y Bárbara García secundada por la sorpresa entre los jóvenes: Romel Frómeta. Cada pareja actuó con derroche técnico, pero, sin dudas, Hormigón y Torrado mostraron una significativa ventaja, por su convicción y madurez."

ABC, publicó el 29 de julio