Diseños: Frank Álvarez
Luces: Ruddy Artiles
La personalidad de los jóvenes poetas cubanos del siglo XIX, Juana Borrero y Carlos Pío Uhrbach, es evocada en este ballet. Juana Borrero, poetisa altamente valorada por Lezama Lima: «de una importancia extraordinaria, un caso único en nuestra literatura, un caso único en nuestro idioma», decía; y Carlos Pío Uhrbach, el joven poeta mambí que dio su vida con honor y valentía luchando por la libertad de Cuba, sostuvieron una mítica relación amorosa, que concluyó trágicamente con la muerte. Su primer encuentro, evocado en este dúo de amor, se produjo cuando ambos jóvenes coincidieron la noche del 10 de marzo de 1896, para observar un eclipse de luna. La música utilizada es el Estudio sinfónico para orquesta, del importante compositor cubano Lico Jiménez (1855-1917).